Presión de los neumáticos

Presión de neumáticos y seguridad

Mantener la presión correcta de los neumáticos es vital por varias razones. En primer lugar, garantiza la seguridad en la carretera. Los neumáticos con presión insuficiente pueden provocar un manejo deficiente, una tracción reducida y distancias de frenado más largas, lo que aumenta el riesgo de accidentes. Por otro lado, los neumáticos sobreinflados pueden resultar en un viaje más áspero, menos contacto con la carretera y una mayor probabilidad de reventones y daños en las llantas.

Presión de los neumáticos y eficiencia de combustible

La presión adecuada de los neumáticos también afecta a la eficiencia de combustible. Los neumáticos con presión insuficiente generan una mayor resistencia al rodaje, lo que hace que el motor trabaje más y consuma más combustible. Mantener la presión adecuada puede llevar a ahorros significativos en la gasolinera.

Presión de neumáticos y salud de los neumáticos

Además, la presión correcta de los neumáticos prolonga la vida útil de los neumáticos, reduciendo la frecuencia de reemplazos y disminuyendo los costos de mantenimiento. Es un aspecto sencillo pero crucial del mantenimiento del vehículo que garantiza la seguridad, la economía de combustible y el rendimiento general del vehículo.

Mantener la presión de los neumáticos correcta

La mayoría de los automóviles modernos cuentan con un Sistema de Monitoreo de la Presión de los Neumáticos (TPMS, por sus siglas en inglés). Un sensor TPMS funciona mediante la monitorización constante de la presión de aire dentro de cada neumático y transmitiendo esta información a la computadora a bordo del vehículo. Hay dos tipos principales de sensores TPMS:

TPMS Directo: Estos sensores se instalan dentro de cada neumático, generalmente en el vástago de la válvula o como parte de la estructura interna del neumático. Utilizan sensores de presión para medir la presión de aire y la temperatura dentro del neumático. Si la presión baja por debajo o excede los niveles recomendados, el sensor envía una señal a la computadora del vehículo, la cual luego alerta al conductor mediante una luz de advertencia en el tablero.

TPMS Indirecto: En lugar de utilizar sensores de presión dentro de los neumáticos, el TPMS indirecto se basa en los sensores existentes del vehículo, como los sensores de velocidad de las ruedas en el sistema de frenos antibloqueo (ABS) o el sistema de control de estabilidad. Monitorea la velocidad de rotación de cada neumático y, si detecta una diferencia significativa en la velocidad, lo interpreta como un cambio en la presión de los neumáticos y activa una advertencia.

Si tu coche no está equipado con sensores TPMS, deberás verificar la presión de la manera tradicional, con un medidor de presión de neumáticos. Esta es una herramienta relativamente económica y puede ser bueno tenerla siempre a mano en el coche. Para verificar la presión de los neumáticos, sigue los siguientes pasos: